Recomendamos la visita a esta página
http://www.ponlegumbres.eu/
En las elecciones celebradas el viernes 27 de marzo de 2015 se procedió a la renovación de la presidencia, la secretaría general y las vocalías 2 y 4 de la Junta de gobierno de la Confederación. El nuevo presidente, Nazario Martín León, es miembro de la Real Sociedad Española de Química y profesor del Departamento de Química Orgánica de la Universidad Complutense de Madrid. Alicia Alonso Izquierdo, de la Sociedad de Biofísica de España, es la nueva secretaria general.
Gregorio Montero González, investigador del INIA-CIFOR, fue elegido vocal del área 4, correspondiente a las Ciencias de la Tierra, Agricultura y Medio ambiente.
El pasado 4 de marzo se constituyó la nueva Sección de Seguridad Alimentaria y Nutrición del Comité Científico de la Agencia Española de Consumo, Seguridad Alimentaria y Nutrición (AECOSAN). El Consejo de Dirección, a propuesta de la Presidencia de la AECOSAN, ha nombrado a los 20 miembros de la Sección de Seguridad Alimentaria y Nutrición del Comité Científico.
El Comité Científico es el Órgano de Evaluación de Riesgos que asume las funciones de proporcionar a la AECOSAN dictámenes científicos, definir el ámbito de los trabajos de investigación necesarios para sus funciones y coordinar los trabajos de los grupos de expertos que realicen actividades de evaluación de riesgos en el marco de las actuaciones de la Agencia. Está integrado por dos secciones, una de Seguridad Alimentaria y Nutrición y otra de Consumo.
La Sección de Seguridad Alimentaria y Nutrición está integrada por 20 miembros de reconocida competencia científica en ámbitos relacionados con la seguridad alimentaria y nutrición tales como Toxicología Alimentaria, Microbiología, Virología, Parasitología o Zoonosis Alimentarias, Epidemiología Humana y Animal, Biotecnología y Modificación Genética, Inmunología y Alergología, Nutrición Humana, Farmacología, Procesos Tecnológicos Alimentarios o Análisis e Instrumentación.
En el último número de la revista Lecturas se dan 12 ricas recetas con legumbres como crema de garbanzos y zanahorias, sopa de verdura con alubias blancas, sopa de lentejas con pimientos o sopa de habas y verduras al pesto.
Desde aquí damos gracias a la revista Lecturas por promocionar con estas recetas el consumo de las legumbres.
Fuente: Lecturas, nº 3281, febrero 2015.
Fotografía Mertxe Alarcón. Estilismo: Carmen Figueras Cocina: Begoña Montané. Atrezo; Coton et Bois
Fuente: Consejería de Agricultura, pesca y alimentación (Junta de Andalucía)
El avance de superficies y producciones agrícolas de 2014 elaborado por la Consejería de Agricultura, Pesca y Desarrollo Rural estima que en la comunidad autónoma andaluza se recogerán cerca de 57.000 toneladas de leguminosas en grano. Esta cantidad, obtenida en base a la última estimación realizada a finales de junio, supone un incremento del 37% respecto a la producción global de estos cultivos en 2013, que ascendió a 41.515 toneladas. La extensión total dedicadas a estos cultivos en la región se eleva actualmente a 53.355 hectáreas.
Entre las leguminosas en grano que se producen en Andalucía se encuentran las habas secas, con una producción estimada para 2014 que supera las 21.200 toneladas (14.624 hectáreas), y los guisantes secos con un volumen global de 7.424 toneladas (8.088 hectáreas). Además de estos cultivos, en la región se producen también, veza, con más de 3.700 toneladas estimadas para la campaña 2014 (6.376 hectáreas); altramuz dulce, con 1.114 toneladas (1.024 hectáreas); y yeros, con 910 toneladas (4.081 hectáreas). Mención especial merecen los garbanzos, que se posicionan como la leguminosa con mayor producción de Andalucía en esta campaña, si bien aún hay numerosas variables que pueden afectar a la evolución de este cultivo.
Para leer la noticia completa enlazar aquí
El retorno a los cultivos tradicionales y sostenibles es esencial para el futuro del agro.
Retomar el cultivo de leguminosas es esencial para el futuro de nuestra agricultura. La situación actual ha generando un interés renovado por estos cultivos favorecido, además, por el alto precio de los abonos nitrogenados y el incremento de superficie destinada a rotaciones y cultivos ecológicos. Existe una creciente demanda de productos uniformes y de calidad que, en la situación anteriormente descrita, resulta difícil de conseguir. Por ello la Unión Europea quiere animar a los agricultores a reintroducir las leguminosas entre sus cultivos. Una importante medida de apoyo lo constituye la nueva PAC 2014-2020, centrada en una mejora de la calidad y estructura del suelo, aumentando la producción a un menor coste. Entre las prácticas agronómicas para cobrar el pago verde se encuentra la diversificación de cultivos, proponiendo la rotación con un mínimo de tres, entre las que se incluirían leguminosas.
El incremento en la superficie de cultivo de leguminosas y la reactivación de su comercio en la UE está sujeto a un incremento de su competitividad económica. Para ello se deben resolver algunos de los principales factores limitantes de su producción y productividad. Por ello la UE esta financiando diversos proyectos de investigación de gran envergadura entre los que se encuentra Legato, Leguminosas para la Agricultura del Mañana. El equipo de Mejora y Biotecnología del Instituto de Investigación y Formación Agraria y Pesquera (Ifapa), desde su centro Alameda del Obispo de Córdoba, es uno de los grupos participantes en este proyecto Europeo y desarrollará su trabajos en habas.
para leer el artículo completo enlazar aquí
Desconozco las razones (aunque tengo mis hipótesis) al respecto de la poca atención que se les presta a las legumbres, como alimento, en la mayor parte de las recomendaciones y guías de consumo. Figuran en ellas, eso es cierto, pero si bien sobre la mayor parte del resto de grupos de alimentos se realizan enconadas advertencias al respecto de su consumo (ya sea para bien o para mal) sobre las legumbres parece que las ha mirado un… ciego (peor aun que un tuerto). Y no me parece nada justo.
Sean como sean las recomendaciones, el consumo de legumbres en España ha caído en picado desde nuestro pasado más o menos reciente. Así, si en 1961 se cifraba el consumo de legumbres en unos 26,8 gramos por persona y día; en 1970 esta cifra descendía a los 21,0 gramos; en 1980 a 15,3 gramos; en 2000 a 13,5 gramos; en 2006 a 11,9 gramos; en 2008 11,1 gramos y, el último dato del que dispongo, sostiene que en España y en 2011 se hizo un consumo de 8,6 gramos de legumbres por persona y día. Lo que significa que en lo referente al periodo 1961 y 2011 los españoles de hoy en día comemos menos de una tercera parte que lo que comían aquellos de principios de la década de 1960. Pocos alimentos además del pan han sufrido semejante varapalo (no te lo pierdas, dos alimentos que son típicos como ellos solos de la verdadera dieta mediterránea).
Sin embargo y para ser sincero, parece que desde 2011 y hasta la reciente actualidad el mercado ha sufrido un considerable repunte, al menos en cifras de producción y comercialización, aunque para conocer si hemos terminado comiendo más legumbres que hace tres cuatro años habrá que esperar a que se publiquen las estadísticas correspondientes.
Decía antes que no me parecía justo que la mayor parte de las recomendaciones dietéticas “oficiales” pasen casi de puntillas sobre el consumo de legumbres, me refiero a una injusticia desde el más estricto punto de vista nutricional y de sus posibles beneficios sobre la salud. Y es que, por sus inherentes cualidades es difícil encontrarles pega alguna, y más al contrario sí muchas ventajas, tal y como unos cuantos dietistas-nutricionistas nos afanamos en aclamar (véase este texto de Julio Basulto). Veamos:
Tienen tantas o más proteínas por unidad de peso que las carnes. Por poner solo un ejemplo baste decir que 100g de lentejas (en seco) aportan 23 gramos de proteínas, frente a los 19,3 gramos contenidos en 100g de solomillo de ternera; y el resto de legumbres secas parecido. La particularidad de estas proteínas es que, en general, son poco ricas en un aminoácido esencial (la metionina) y por esa razón se dice de este tipo de proteínas que son de “bajo valor biológico”. ¿Pero acaso ha de ser considerado esto un “problema” dentro de un patrón de alimentación equilibrado? Para nada, muchos otros alimentos contienen ese aminoácido.
Además, en las legumbres es imprescindible destacar su riqueza en fibra. De hecho yo no conozco ningún otro grupo de alimentos que, de forma general, aporte tanta fibra por unidad de peso como lo hacen las legumbres. Pocos alimentos pueden competir con los cerca de 8 gramos de fibra por cada 100g de unas lentejas o unos garbanzos cocidos.
Todo ello tomando en consideración un interesante aporte de minerales (entre ellos el hierro y el potasio) y de algunas vitaminas (en particular el ácido fólico), amén de algunos fitonutrientes del tipo flavonoide.
Así, muy en resumen, de las legumbres se podría decir que se trata deun alimento de bajo índice glucémico, bajo en grasa, sin colesterol (sin considerar la posible fuente de colesterol por parte de otros ingredientes que las acompañen), ricas en proteínas y una excelente fuente de fibra dietética… en resumen, una maravilla que, como decía, tenemos semi olvidada.
En el terreno culinario, las legumbres ofrecen la posibilidad de confeccionar una considerable variedad de recetas. Además de los consabidos potajes y cocidos, este grupo de alimentos también se presta a otras recetas en forma de purés, cremas o patés (tipo hummus) y por supuesto a formar parte de coloridas ensaladas. Lo digo porque parece que para muchas personas solo el invierno es tiempo para este manjar; sin embargo, hay numerosas recetas refrescantes que se sirven en frío y que son óptimas para el periodo estival. Quizá, que me gusten tanto las legumbres se debe a que, bien entendidas, son un ingrediente que suele implicar una cierta dedicación e inclinación por las cuestiones culinarias con todo lo que ello implica, entre otras cosas una también conveniente planificación de los menús. Cierto que también están las conservas de platos preparados a base de legumbres (cocidos, fabadas, etcétera)… pero no es lo mismo. En cualquier caso, una solución a medio camino y que sí podría ser más o menos válida consiste en la utilización de conservas de legumbres “al natural” sin más ingredientes que las propias legumbres ya cocidas y que pueden ser de gran utilidad para ahorrar un tiempo que en momentos puntuales no se tenga.
Así pues, creo que es hora de poner en valor las cualidades de este grupo de alimentos y ponerlas, por lo menos, al nivel de las verduras y hortalizas. Para ello baste hacer buena esas recomendaciones que casi pasan desapercibidas en buena parte de las guías alimentarias y con ellas recurrir a una frecuencia en su consumo que ronde entre las 2 a 4 veces por semana. Como se hacía antes, vamos… cuando nuestro patrón dietético estaba mucho más próximo al estándar mediterráneo.
Juan Revenga (@juan_revenga)
El Reglamento (UE) nº 1169/2011 del Parlamento Europeo y del Consejo de 25 de octubre de 2011 sobre la información alimentaria facilitada al consumidor, publicado en noviembre de 2011, se aplica desde día 13 de diciembre de 2014
El propósito del Reglamento es perseguir un alto nivel de protección de la salud de los consumidores y garantizar su derecho a la información para que los consumidores tomen decisiones con conocimiento de causa. Las Principales Novedades son:
-Etiquetas más legibles (tamaño mínimo de fuente, información nutricional)
-Obligatoriedad de indicar el país de origen en el etiquetado, ahora también para la carne fresca de cerdo, ovino, caprino y aves de corral.
-Se obliga a informar sobre el proceso de descongelación (con determinadas excepciones).
-Se introduce el deber de informar cuando un componente o ingrediente (utilizado habitualmente) se ha sustituido por otro.Aceites o grasas de origen vegetal, con indicación del origen vegetal específico
-Alérgenos, deberá aparecer en la lista de ingredientes. También deberán ser indicados en los alimentos que se suministran sin envasar al consumidor final o se envasan en el punto de venta, por ejemplo en los establecimientos de restauración
Más información AECOSAN
http://aesan.msssi.gob.es/AESAN/web/cadena_alimentaria/detalle/futura_legislacion.shtml
La autoridad Europea de seguridad alimentaria (EFSA) emite un informe positivo sobre la importación de la variedad de clavel IFD-26407-2 que ha sido mejorada genéticamente para expresar mayores niveles de antocianinas en los pétalos y así conferir un color malva fuerte a las flores. La importación de dicho producto dentro de la Unión Europea sería para su uso ornamental
EFSA asegura que la liberación de claveles transgénicos en el medio ambiente no implicaría ningún riesgo ambiental derivado
Fuente: Fundación Antama